Con una sonrisa radiante y un espíritu inquebrantable, Jenny Esmeralda Carrasco, originaria de Venezuela, ha trazado su camino en Panamá desde su llegada hace cinco años. Su travesía ha estado marcada por desafíos, especialmente cuando, a mediados de año, se encontró sin empleo. Sin embargo, como dice el dicho, “de las crisis nacen las mejores oportunidades”.
Fue en este momento de necesidad que nació “Misstetas de Helados”, un emprendimiento que no solo busca endulzar el día de sus clientes, sino que también encarna una historia de resiliencia y creatividad. Con el calor tropical de Panamá como telón de fondo, Jenny decidió combinar la tradición venezolana de las “tetas” —un dulce característico que evoca recuerdos de la infancia— con un giro refrescante: ¡helados irresistibles!
La búsqueda de empleo a su edad presentó sus propias dificultades, pero Jenny transformó esas barreras en escalanes hacia su éxito. Su pasión por la cocina se convirtió en la chispa que encendió su emprendimiento, demostrando que, con dedicación y amor por lo que se hace, es posible superar cualquier obstáculo. “Ver a mis clientes satisfechos es mi mayor recompensa”, comparte con alegría.
La historia de Jenny refleja el surgimiento de una cultura emprendedora en Panamá, donde cada vez más personas se atreven a seguir sus sueños. Sin un local físico, Jenny ha llevado su arte a las calles, ofreciendo un producto que no solo es un deleite, sino también una conexión auténtica con su herencia.
“Misstetas de Helados” ha resonado en las redes sociales, donde sus coloridos y creativos helados han capturado la atención de muchos. Este fenómeno ha demostrado que, con un poco de ingenio y una buena dosis de esfuerzo, es posible convertir los sueños en realidad.
Así que, si buscas un helado que no solo refresque tu paladar, sino que también cuente una historia de superación y perseverancia, no dudes en buscar a Jenny. Con cada bocado, disfrutarás de un pedacito de su historia y un sinfín de sabores. ¡Brindemos por más emprendedores como ella que iluminan nuestro camino con dulzura y determinación!