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A finales de abril se debe conocer si habrá público o no en los Juegos Olímpicos de Tokio

Tokio (EFE).

Las dudas sobre la realización de los juegos y sus procedimientos siguen estando latentes, mientras los organizadores no dan su brazo a torcer. Foto: EFE (KIMIMASA MAYAMA/EFE)

Los organizadores de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 dijeron hoy que “continúan estudiando” si habrá público en las gradas de las competiciones deportivas, pese a que se esperaba un anuncio al respecto para finales de este mes.

“Podríamos necesitar más tiempo (para tomar la decisión), pero para finales de abril deberíamos determinar la dirección general”, dijo hoy al respecto la presidenta del comité organizador de Tokio 2020, Seiko Hashimoto, en rueda de prensa.

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La responsable de los JJOO de Tokio señaló que esta decisión se está analizando junto con expertos sanitarios, las autoridades niponas y el Comité Olímpico Internacional (COI).

Las dudas sobre la presencia de público en las gradas de los Juegos se han incrementado debido al repunte de contagios de coronavirus en Japón en las últimas semanas, cuando quedan poco más de tres meses para la cita olímpica.

Esta evolución ha llevado al Ejecutivo nipón a contemplar la declaración de un nuevo estado de emergencia sanitaria en Tokio y otras regiones, lo que conllevaría restricciones más duras para frenar contagios.

La declaración del estado de emergencia “no alteraría los preparativos para los Juegos, lo que incluye la celebración de eventos de prueba”, afirmó Hashimoto en una comparecencia ante los medios tras la intervención de los responsables de la organización en una reunión de la ejecutiva del Comité Olímpico Internacional.

El comité organizador explicó al COI las medias anti-contagios que prevé aplicar para atletas y otros participantes en los Juegos, que continuarán definiéndose en los próximos meses antes del evento.

El pasado marzo el comité organizador anunció la decisión sin precedentes de impedir el acceso al país anfitrión de visitantes extranjeros para los Juegos, que fueron retrasados un año desde su fecha inicialmente prevista del pasado verano debido a la pandemia.