El verano de Morata ha sido una montaña rusa de situaciones turbulentas. Después de alzar el trofeo de la Eurocopa con la selección española, su futuro en el Atlético de Madrid quedó en suspenso. Las especulaciones sobre su posible salida del club colchonero se intensificaron hasta que finalmente se confirmó su fichaje por el AC Milan. Un cambio de aires que parecía ideal para un jugador que buscaba revitalizar su carrera en un entorno familiar, como es la Serie A, donde ya había dejado huella en su etapa anterior con la Juventus.
A first @emirates MVP award in his first game 💪#MilanTorino: primo gol e primo premio di MVP 💪#SempreMilan pic.twitter.com/lmGS5JV9LO
— AC Milan (@acmilan) August 18, 2024
El debut de Morata con el Milan fue una mezcla de esperanza y decepción. Entró al campo con el marcador en contra, pero rápidamente mostró su calidad al recortar distancias en el 89′. Su actuación fue determinante para que el equipo lograra un empate en un partido que parecía perdido.
Sin embargo, la alegría fue efímera. Al término del encuentro, se confirmó que Morata había sufrido una lesión muscular que lo mantendría alejado de los terrenos de juego durante tres semanas.
Esta lesión no solo afecta su situación en el Milan, donde se perderá los próximos partidos contra el Parma y la Lazio, sino que también lo deja fuera de la convocatoria de la Selección Española para la Nations League. Luis de la Fuente, técnico de la selección, deberá buscar alternativas ante la baja de uno de sus delanteros más experimentados.
Las palabras de Morata tras el partido reflejan la frustración que siente. “Penalti, fuera de juego, gol, amarilla. Me pasa de todo. A veces no sé por qué me pasa todo a mí”, declaró con resignación. A pesar de la adversidad, el delantero español se centra ahora en su recuperación, con la esperanza de regresar a los entrenamientos después del parón de selecciones en septiembre y consolidarse como un pilar en el ataque del Milan.