Su innegable talento para el dibujo lo ha convertido en uno de los mejores caricaturistas del patio. Sus trabajos, que él cataloga como caricaturas editoriales, utilizan el humor y la exageración gráfica para criticar o expresar una opinión sobre temas de actualidad, personajes públicos o situaciones sociales y políticas. Hilde Sucre, quien forma parte de la familia de Mi Diario, está celebrando 18 años dedicados a esta profesión, que le ha dado muchas alegrías y reconocimientos, pero que también le ha buscado más de un apuro con algunos personajes que se han sentido molestos por sus caricaturas.
El más destacado fue el que tuvo con el expresidente Ricardo Martinelli, quien lo demandó. Cuenta que en ese entonces él trabajaba en el Panamá América y un día le dijeron que ya no podía dibujarlo. “Me tuve que ir porque cuando a un caricaturista le ponen esa censura ya uno siente como que no está haciendo bien el trabajo”, recordó. “En ese entonces él era presidente y yo le daba palo”.
El alto costo de la vida, las botellas, los políticos, los deportes, han sido muchos los temas que Hilde ha abordado a lo largo de su carrera. Señaló que la caricatura es irremplazable, ya que se compone del arte de hacer el dibujo y el arte de expresar una situación tanto política como social con el mensaje que encierra.
Sobre las nuevas generaciones, comentó que existen jóvenes muy talentosos. En El Cartel del Lápiz, espacio en Instagram que reúne a los mejores caricaturistas de Panamá, reciben los trabajos de caricaturistas que están empezando y que se quieren integrar. “Hay unos muy buenos, así que hay relevo generacional”, señaló.
A todos les recomendó que aprovechen las redes sociales. “Suban sus trabajos, sus dibujos, sus caricaturas, ya que algún medio los va a ver y si el trabajo es bueno, si el caricaturista es bueno, puede que los llamen”, comentó Hilde.