Farándula

Un monumento ícono de Bruselas se viste de Congo para honrar a la Ciudad de Panamá

El Manneken Piss lució bien panameño

Luis Rodriguez

Por Luis Rodriguez

Narra la leyenda que por los años 1300 Bruselas llevaba tiempo sitiada por una potencia extranjera, cuyos atacantes idearon colocar explosivos en las murallas que rodeaban la urbe, pero sucedió algo inaudito, un pequeño los estaba espiando y salvó a la ciudad porque orinó en la mecha encendida.

Esta es tan solo una de las varias leyendas que rodean al origen de uno de los monumentos más icónicos de la parte antigua de Bruselas, Bélgica que esta semana lució un pedacito de Panamá.

En el marco de las celebraciones por los 500 años de fundación de la ciudad de Panamá, el Manneken Pis (traducido al español como el hombrecito que orina) luce una particular indumentaria muy panameña, la del rey congo.

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Una genial idea

Pero, ¿cómo surgió la iniciativa para que esta estatua que data del siglo XVII luciera el vestuario congo? Mucho tuvo que ver la embajada panameña en el país europeo, presidida por Alfonso Young quienes donaron el vestuario.

“El traje que hemos elegido para ofrecerles hoy, es un traje que tiene un valor histórico, simbólico y significativo para nosotros, detalló en su discurso del Encargado de Negocios de la embajada panameña, en presencia de un grupo de personas entre los que se encontraban autoridades belgas y un nutrido grupo de panameños.

“Hemos optado por ofrecer este traje en primer lugar por lo típico de la cultura congo, pero también por los valores que transmite y su proximidad a los del Manneken-Pis, detalla en otra parte del discurso de Young.


No es la primera vez que esta estatua de 65.5 centímetros la visten, ya anteriormente ha lucido el vestuario de Santa Claus, de recolector de basura y de otras profesiones.