A partir del 16 de septiembre, Alemania pondrá en marcha controles temporales en todas sus fronteras terrestres con el objetivo de fortalecer la seguridad interna y frenar la migración irregular. El anuncio fue hecho por Nancy Faeser, ministra del Interior, quien destacó que esta medida busca minimizar el impacto en las regiones fronterizas y se implementará en colaboración con los países vecinos.
El país ya ha realizado controles más estrictos en sus fronteras con Polonia, Suiza y la República Checa, y ahora extenderá la medida a sus fronteras con Francia, Luxemburgo, Países Bajos, Bélgica y Dinamarca. Estos controles, inicialmente previstos para durar seis meses, se desarrollan en medio de una creciente preocupación pública por la migración irregular, agravada por un ataque mortal perpetrado por un solicitante de asilo sirio en Solingen.
Cultural Enrichers Were Just Flown Into Germany from Malta.
— Amy Mek (@AmyMek) August 29, 2019
PM of Malta thanked Germany for relocating a number of migrants "rescued" from the Mediterranean
25.5% of Germans Now Come From Migrant Backgrounds & 42% of young kids are of migrant backgroundshttps://t.co/1YHY56yaR0 pic.twitter.com/KXOSbvyTvn
Faeser dejó claro que, aunque Alemania sigue apostando por un sistema de asilo europeo común, la situación actual exige un mayor control a nivel nacional. En los últimos meses, las autoridades han rechazado más de 30,000 intentos de cruzar la frontera ilegalmente.
La medida coincide con un aumento en el apoyo al partido antiinmigración Alternativa para Alemania (AfD), que recientemente ganó las elecciones en Turingia y quedó en segundo lugar en Sajonia. Mientras tanto, los socialdemócratas de Faeser se preparan para las próximas elecciones en Brandeburgo, un terreno políticamente complicado.
El espacio Schengen, que permite la libre circulación entre los países miembros de la Unión Europea, queda temporalmente alterado con la implementación de estos controles. Varios países han adoptado medidas similares en respuesta a la pandemia y a eventos de seguridad nacional, y Alemania no es la excepción.