Al menos cuatro personas han muerto, entre ellas una mujer, y otras diez han resultado heridas en un ataque de una célula de la organización yihadista Estado Islámico al sur de la ciudad histórica de Palmira, en el centro de Siria.
Los yihadistas atacaron con sus ametralladoras a un grupo de personas que estaban recogiendo trufas a unos 70 kilómetros al sur de las ruinas históricas.
Los servicios de emergencias han trasladado al Hospital de Palmira los cuerpos sin vida de cuatro personas y a otros diez heridos “con agujeros de bala por todo el cuerpo”, ha lamentado el portavoz del centro, el doctor Wael Jihad Antakli, a la agencia oficial de noticias SANA.
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Entre los heridos hay algunos en estado grave que han sido trasladados a la ciudad de Homs, capital de la gobernación (o provincia) donde está Palmira, para recibir atención especializada.
A pesar de la derrota territorial del califato yihadista en 2019, la organización sigue operativa a través de células esparcidas por el país, que atacan habitualmente a la población.
Todo esto se registra en medio de la tragedia que ha dejado el terremoto de 7,8 grados con miles de víctimas. Las labores de rescate todavía se mantienen.