El comisionado presidencial de El Salvador, Christian Flores, fue arrestado por la Policía Nacional por el delito de cohecho impropio. Según la Fiscalía General, Flores “valiéndose de su cargo, como comisionado presidencial, exigía dinero a personas y empresas a cambio de beneficios y participación preferencial en los proyectos estratégicos del Gobierno”.
El presidente Nayib Bukele reaccionó a la detención, diciendo que “no es el primero, y tampoco será el último” y que iniciarán una “guerra frontal” contra la corrupción, similar a la “guerra contra las pandillas”.
Por otro lado, el Observatorio Universitario de Derechos Humanos (OUDH) pidió al Congreso de El Salvador que derogue el régimen de excepción que Bukele utiliza para combatir a las pandillas, argumentando que la situación de violencia ha mejorado y ya no es necesario. El OUDH también cuestiona las cifras oficiales de homicidios en 2023, afirmando que existe un subregistro.