El papa Francisco ha expulsado al sacerdote argentino Fernando María Cornet, quien estaba incardinado en la arquidiócesis italiana de Sassari, por el grave delito de cisma. Esta decisión fue confirmada en un comunicado oficial firmado por el canciller de la arquidiócesis, Antonio Spanu. En el comunicado se menciona que Cornet ha sido destituido del estado clerical y exento del celibato eclesiástico debido a delitos contra la fe, específicamente cisma.
Cornet había cuestionado la legitimidad del pontificado de Francisco, argumentando que la renuncia de Benedicto XVI en 2013 fue inválida y, por lo tanto, consideraba a Francisco como un “antipapa”. Estas afirmaciones las difundió en entrevistas, conferencias y en su libro titulado “¿Habemus antipapam? Investigación en honor a la verdad”, publicado recientemente en Italia.
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A pesar de recibir una carta del Vaticano solicitándole que retirara su libro y reconociera a Francisco como legítimo Papa, Cornet se negó a hacerlo, argumentando que no le habían explicado cuáles eran sus errores.
El proceso contra Cornet se inició en agosto, cuando el Dicasterio para la Doctrina de la Fe le dio un plazo de 15 días para defenderse. Al no hacerlo, se llegó a la decisión final de su excomunión y destitución.
El arzobispo de Sassari instó a la comunidad diocesana a orar por la unidad de la Iglesia, recordando que todos los cristianos son parte del mismo cuerpo de Cristo y deben evitar divisiones.