Linda Leccesse, una trabajadora sexual de 30 años en Marietta, Ohio, tuvo contacto con más de 200 clientes a pesar de saber que era portadora del VIH. Leccesse, quien operaba principalmente en Market Street en Marietta, una pequeña ciudad en el sureste de Ohio, cerca de la frontera con West Virginia, se enteró de su estatus positivo a comienzos de 2022.
Las autoridades estatales han instado a cualquier persona que haya tenido contacto con ella a hacerse una prueba de VIH, ya que podría haber propagado el virus a lo largo de la costa este de los Estados Unidos. El Sheriff del condado de Washington, Mark Warden, alertó sobre el riesgo significativo de salud pública y destacó la importancia de la confidencialidad y la cooperación de los afectados. “Este caso podría tener ramificaciones desde Florida hasta la costa este”, pero también hay individuos locales a los que vamos a contactar.
El Departamento de Salud de Marietta/Belpre, por su parte, también solicitó a cualquiera que haya estado involucrado con Leccesse que sea “brutalmente honesto” con los oficiales. La administradora del departamento, Barbara Bradley, afirmó que “el Departamento de Salud de Marietta/Belpre es una zona libre de juicios con total confidencialidad,” señalando que tanto los familiares de los clientes de Leccesse como cualquier persona que haya tenido contacto sexual con ellos también están en riesgo del “negocio arriesgado.”
Leccesse fue detenida el 13 de mayo por solicitar sexo y fue acusada de un delito de tercer grado tras confirmarse su condición de portadora del VIH.