Chiara Jaconis, una turista de 30 años originaria de Padua, falleció en Nápoles tras ser golpeada en la cabeza por una estatua que cayó desde un balcón. El trágico incidente ocurrió mientras paseaba por los Quartieri Spagnoli con su novio, Livio Rousseau. La estatua, que pesaba alrededor de dos kilos, fue empujada accidentalmente por unos niños desde un apartamento alto.
La mujer fue llevada de urgencia al Ospedale del Mare, donde se le realizó una cirugía para tratar las graves lesiones que sufrió. A pesar de los esfuerzos médicos, su condición se deterioró y falleció dos días después. Su padre, Gianfranco Jaconis, expresó su dolor y agradecimiento al personal médico por su dedicación.
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Chiara vivía desde hacía seis años en París, donde trabajaba para Prada. El viaje a Nápoles fue un regalo de su novio por su cumpleaños.
Las autoridades locales han iniciado una investigación para esclarecer el accidente y la Fiscalía de Nápoles ha identificado el apartamento de donde cayó la estatua, cuyos dueños podrían enfrentar cargos de homicidio involuntario tras el incidente. El alcalde de Nápoles y otros funcionarios expresaron su apoyo a la familia Jaconis en este difícil momento.