En un giro sorprendente, Linda Gesto, amiga cercana del expresidente Ricardo Martinelli y conocida por su implicación en el escándalo de sobornos de Odebrecht bajo el apodo de “Periquito 1”, está ahora en la planilla de la Asamblea Nacional.
Según el registro publicado en el portal de la Contraloría General de la República, Gesto comenzó su trabajo el 1 de agosto como asistente administrativo 1, con un salario de $5 mil mensuales. Gesto no es la única de las “periquitas” en el ojo del huracán. A ella se suman Úrsula Banz (“Periquito 2”), María Sol Rivera (“Periquito 3”), y Aurora Muradas (“Periquito 4”).
La investigación del Ministerio Público revela que Gesto recibió al menos $160 mil en transferencias de Odebrecht, una de las 49 personas imputadas por blanqueo de capitales. El antiguo Juzgado Tercero Liquidador de Causas Penales ya solicitó su sobreseimiento. Úrsula Banz, que también figuraba en la planilla de la Asamblea, recibió $150 mil.
María Sol Rivera, igualmente con $150 mil, y Aurora Muradas recibió diversos beneficios, incluyendo una obra de arte valorada en $85 mil, compras de lujo y al menos $90 mil en transferencias.
De estas, Úrsula Banz fue la única en declarar ante los fiscales, afirmando su inocencia y acogiendo el artículo 25 de la Constitución, que protege contra la autoincriminación. En una entrevista reciente, Dana Castañeda, presidenta de la Asamblea Nacional, defendió los nombramientos de asesores y aseguró que “se garantiza que trabajan”.
Castañeda indicó que las bancadas eligen a sus asesores y que revisará cualquier impedimento para el desempeño de sus funciones. La trama de los “periquitos” y su conexión con el caso Odebrecht sigue desvelando sorpresas en el ámbito político nacional.
Información de Eliana Morales Gil/ prensa.com