El caso que dejó al país en shock vuelve a encender titulares. La historia de la supuesta bebé fallecida en Bugaba —que terminó siendo una muñeca dentro de un ataúd— tomó un nuevo giro después de que el Tribunal de Juicio de Chiriquí declarara no culpable, de manera unánime, a Tahyra Edilka Montero de Morris, conocida ya como la “mamá” de la muñeca.

Los tres magistrados determinaron que la Fiscalía no logró acreditar los delitos de simulación de hecho punible, calumnia en las actuaciones y falsificación de documentos, delitos relacionados con la fe pública.
La decisión dejó a la familia paterna sumida en frustración y al país esperando respuestas.
El engaño que terminó en un funeral
La historia inició cuando Tahyra, pese a estar casada, sostuvo una relación con Ducdiel Morales, quien creyó que se convertirían en padres. Ella aseguró que había dado a luz y que la bebé falleció. La familia paterna, devastada, organizó un funeral sin haber visto antes a la supuesta recién nacida.
Pero la verdad salió a flote cuando la abuela pidió abrir el pequeño ataúd blanco. Dentro no había una bebé… sino una muñeca con guantes rosados y algodones en la nariz. La imagen se viralizó en todo el país.
Imágenes editadas y documentos cuestionados
Durante las investigaciones, se descubrió que fotos donde Tahyra aparecía supuestamente hospitalizada tras “dar a luz” eran imágenes editadas de 2015.
El Hospital Santo Tomás negó haber atendido un parto suyo.
El certificado de defunción correspondía a otra persona.
El certificado de nacimiento también era falso.
A esto se sumaron múltiples versiones cambiantes por parte de la acusada.
La reacción de la abogada de la víctima: “No culpable no significa inocente”
Tras el veredicto, la abogada de Ducdiel Morales, Giovanni “La Wyznick” Ortega, reconoció públicamente que, por ahora, no puede dar más detalles hasta que se conozca la motivación completa del fallo, programada para el 5 de diciembre.
Sin embargo, sí dejó clara una frase en Instagram que encendió la discusión nacional:
“No culpable no significa inocente.”
Ortega recordó que la familia está profundamente frustrada después de confiar en un proceso que terminó liberando a la acusada.
Además, informó que, una vez se lea la sentencia con su motivación, la querella y el Ministerio Público evaluarán si presentarán una apelación.
¿Qué viene ahora?

Panamá espera conocer las razones jurídicas que llevaron a los tres magistrados a absolver un caso rodeado de mentiras, documentos falsos y un funeral que terminó en escándalo.
Mientras tanto, la familia paterna intenta procesar una verdad dolorosa: la bebé nunca existió, pero el daño sí.
