Las estrechas calles de Portobelo se quedaron pequeñas este domingo ante la llegada de cientos de personas que visitaron el pueblo en el primer día de novena en honor al Cristo Negro. Los fieles llegados de varios sitios del país abarrotaron cada esquina del lugar, mientras los alrededores de la iglesia San Felipe se llenaron de puestos de venta de todo tipo de artículos religiosos, velas, imágenes, camándulas, llaveros, calendarios. Entre esa amalgama de comerciantes nos encontramos con el señor Luis, quien es devoto del Cristo y desde hace 18 años monta su puestito para ganar unos reales con que llevar el sustento a su hogar. Él espera que este año haya muchas ventas y que el Cristo Negro bendiga a todos los peregrinos que los visiten durante esta fiesta patronal.
La fila de los que deseaban llegar a los pies del santo era interminable, mientras muchas otras personas esperaban dentro del templo, en medio del calor, el inicio de la misa. A las 11:00 de la mañana, el movimiento de la fila se detuvo y para dar paso a la celebración eucarística presidida por el padre Ángel Pinilla, quien está al frente de la parroquia desde hace casi cuatro años. Él les dio la bienvenida a los peregrinos y les recordó que deben ser reflejo de Dios, que es amor y misericordia. También pidió a los presentes, con la franqueza que lo caracteriza, que colaboren con donaciones para cubrir los gastos, ya que el año pasado estos ascendieron a 36 mil dólares y este año se tiene calculado que costarán mucho más. Uno de esos gastos fue la restauración de la imagen del Cristo, que costó de 11 mil dólares, que se cubrieron una parte con donaciones y otra parte con préstamos.
El padre Ángel señaló que el santuario depende de las ofrendas para poder hacerle frente a las obligaciones como luz, agua, pago a la secretaria y muchos más. Además, se ha organizado una rifa para el 27 de octubre a un costo de 10 dólares para los que deseen cooperar.
Las novenas al Cristo Negro de Portobelo se transmiten a las 7:00 a.m. través de Radio María y en la noche por las redes sociales de la parroquia.