Ante los cuestionamientos de diferentes sectores de la sociedad por la falta de fiscalización, el aumento de la planilla estatal y las compras del gobierno, el contralor General de la República Gerardo Solís expresó que contrario a lo que se piensa durante la administración de Laurentino Cortizo se ha reducido la planilla del Estado.
Solís aseguró que la planilla del Estado a diciembre del año pasado fue de 260 mil 838 servidores públicos y costaba $ 411 millones 899 dólares, en la actualidad la planilla es de 256,579 servidores públicos y cuesta $ 409 millones 719 mil dólares, lo que representa menos 1.7%, es decir que la planilla se redujo en casi 2 personas por 100 funcionarios que están trabajando en el Estado.
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El Contralor explicó que el crecimiento de la planilla se adjudica al cumplimiento de las obligaciones generadas por leyes especiales de las diferentes entidades gubernamentales, las que impacta considerablemente la planilla estatal.
En el año 2021, la planilla estatal fue por un monto de $ 4 mil 738.6 millones de acuerdo a un informe de la Contraloría General de la República donde se destaca haberse pagado prestaciones atrasadas.
Solís afirmó que ”la Contraloría no es perseguidora, ni Ministerio Público; las auditorías demuestran un buen manejo. Somos profesionales y neutrales”.
Además “la labor de la Contraloría, no es la labor de un fiscal, tampoco la del defensor, nosotros no juzgamos a las personas auditadas. La Contraloría debe ser técnica, profesional y neutral”.
Agregó que “para reducir el gasto público, ha habido una contención de casi 25%, es decir 50 millones de dólares “.