Un almuerzo convocado por el presidente José Raúl Mulino para este sábado 5 de abril en Penonomé, provincia de Coclé, ha encendido una nueva chispa en el ya tenso panorama político. La cita iba dirigida exclusivamente a los diputados que votaron a favor de la polémica Ley 462, que reforma el cuestionado sistema de pensiones de la Caja de Seguro Social (CSS).
Pero lo que parecía un gesto de cortesía por parte del mandatario, rápidamente se convirtió en un nuevo frente de batalla. El partido Realizando Metas (RM), al que pertenece Mulino, inicialmente autorizó a sus 15 diputados a participar en lo que calificó como un “convivio”. Sin embargo, la publicación que lo confirmaba fue eliminada horas después de su cuenta oficial en la red X.
La coalición Vamos, por su parte, lanzó un comunicado en X en el que mencionaban que “frente al rumor de una potencial reunión a puertas cerradas con algunos diputados, por invitación del presidente”, ellos rechazaban las “reuniones a escondidas”.
En tanto, el Partido Revolucionario Democrático (PRD) también se pronunció vía comunicado, aclarando que “ningún diputado de su bancada fue invitado por el presidente de la República a ninguna reunión en su finca privada”. Desde el partido de Omar aseguran que ellos, como oposición, no asistirán a “encuentros que se den a espaldas del pueblo panameño”.
Otro que fue invitado al almuerzo, pero dijo que no asistiría fue el diputado Ernesto Cedeño, del Movimiento Otro Camino (MOCA). “A mí no tienen que ofrecerme nada, ni un emparedado, por el ejercicio de mis funciones”, dijo en sus redes.
Y luego de todo el revuelo que se armó por la famosa reunión, el presidente Mulino afirmó que el almuerzo era una “invitación personal a los 48 diputados que apoyaron con su voto la ley de la CSS”. El mandatario aseguró que el encuentro será “estrictamente social en un restaurante de Penonomé”.