Policiales

Esperan resultados de ADN por femicidio en la provincia de Chiriquí

Prueba determinaría la culpabilidad del único imputado en este hecho de sangre

Jairo Cornejo

Por Jairo Cornejo

Dejó en la orfandad a tres hijos, dos hombres y una nieta

Unas pruebas de cotejo de ADN, son los elementos que aún están pendientes por entregar como parte de las investigaciones por el femicidio de Nurys Castrellón, de 50 años.

Esto permitirá comprobar si las muestran corresponden con el perfil genético encontrado en las uñas de la víctima y el único imputado por este crimen Efraín Ríos de 20 años.

A inicios de este mes de abril se tenía previsto llevar a cabo la audiencia de acusación, pero debido a que aún no se tenían estos resultados periciales se suspendió y se programó para el próximo mes de junio.

La víctima fue asesinada el 1 de julio del 2018. Su cuerpo presentaba múltiples golpes en su rostro, cabeza y otras partes del cuerpo.

Los gritos de Nurys fueron escuchados por vecinos que no se atrevieron a salir.


Hechos

De acuerdo a las investigaciones Nurys salía todos los días entre 3:00 a 3:30 a.m. de su residencia en la comunidad de Bajo Jaramillo en la provincia de Chiriquí, ya que trabajaba en un restaurante ubicado en Boquete y era la encargada de abrir todos los días el local.

Ella durante su recorrido tenía que pasar obligatoriamente por un zarzo (puente colgante peatonal que comunica a las comunidades), para salir a la vía en donde cogería su transporte. Minutos antes se había acabado una festividad bailable que inició la noche anterior donde gran parte de la comunidad participó.


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El manto de la oscuridad y el silencio de esa madrugada fue aprovechada supuestamente por Efraín que la esperó sigilosamente para robarle el celular de Nurys. Ella en medio del zarzo aparentemente se opuso al robo y comenzó a forcejear con Efraín, quien este presumiblemente estaba bajo los efectos del alcohol y las drogas por lo que la golpeó hasta matarla.

Próximo al zarzo fue donde ubicaron el cuerpo sin vida de Nursy.

No conforme con lo que le había hecho, Nurys fue arrastrada y ultrajada sexualmente cerca al puente de zarzo que une a Bajo Boquete con Bajo Jaramillo. Allí fue ubicada por las autoridades semidesnuda, luego que las compañeras del trabajo alertaran que no había llegado a su trabajo. Actualmente en el lugar donde hallaron su cadáver un grupo de mujer de la comunidad colocaron cruz blanca para no olvidar el hecho que consternó la comunidad y el país entero.

Fue un hecho que consternó a la comunidad de boquete por la forma en que fue asesinada.

En el allanamiento de la residencia de Efraín las autoridades encontraron un collar que le pertenecía a Nurys.

En una audiencia de control las autoridades le formularon cargos por feminicidio, robo agravado y violación carnal por estar presuntamente implicado en el hecho.

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