En un allanamiento sorprendente realizado en los pabellones 1 y 2 del centro penitenciario La Joyita, las autoridades han descubierto una realidad alarmante: los presos tienen acceso a una gama de dispositivos y objetos que superan las comodidades de muchos ciudadanos en libertad.
Bajo el marco del operativo “Armagedón XIII”, se llevó a cabo una exhaustiva requisa que reveló una serie de artículos prohibidos en posesión de los internos. Entre los hallazgos más destacados se encontraron unos 35 celulares con sus accesorios, 117 armas punzocortantes, 31 relojes, 57 perfumes, cuatro envoltorios de marihuana, 13 carrizos de cocaína, tres pesas y un panel solar.
Además de estos elementos, también se incautaron radios transistores, cables eléctricos para cargar dispositivos, espejos, alicates, destornilladores, cajetillas de cigarrillos, billetes de dos dólares y cuatro pistolas automáticas con sus respectivos cargadores y municiones. Estos objetos, encontrados en escondites ingeniosamente construidos, ilustran la creatividad de los reclusos.