La semana pasada el “GobierNito” anunció con bombos y platillos que el vicepresidente “Gaby” Carrizo representaría al mandatario Cortizo en la reciente Asamblea General de Naciones Unidas. Lo hizo.
Resulta que ante el mundo, el vicepresidente y ministro de la Presidencia propuso acabar con los altos precios de las medicinas y que se le exija responsabilidad a los que causan daños al medioambiente.
Eso se escucha bonito y hasta altruista, pero se vuelve hueco y vacío cuando solo es un discurso para decir algo y tomarse una foto para la historia porque la realidad es otra.
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Acá en Panamá los enfermos y sus familiares siguen comprando medicinas caras, mientras este Gobierno no se atreve a reformar las estructuras de importación y para rematar, le baja el presupuesto para el 2023 a sus entidades más científicas, como el Gorgas, Oncológico y Senacyt.
Entonces hay que preguntarse si los jerarcas del Gobierno son mentirosos enfermizos o creen que la ciudadanía es tonta, porque no hacen nada de lo que dicen. Lo que es peor, hasta una licitación en el Minsa la hacen sin transparencia. Ojalá también se atrevieran a decirle esto al mundo.