La prolongación del proceso de licitación para el “servicio de hemodiálisis y kits de hemodiálisis, así como el diseño, construcción y habilitación de unidades de hemodiálisis” está poniendo en riesgo la vida de 2,233 pacientes que dependen de estos tratamientos. Estos pacientes se enfrentan a la necesidad de ser atendidos con equipos que han excedido su ciclo de vida en las salas de la Caja de Seguro Social (CSS)

La falta de medicamentos es una odisea diaria para los pacientes de enfermedades crónicas y degenerativas, quienes enfrentan un sistema que no logra satisfacer sus necesidades. Estos pacientes, cuyo tratamiento depende de fármacos específicos, alzan su voz para denunciar la grave situación.

Un grupo de 250 pacientes con insuficiencia renal en la provincia de Coclé, miembros de la Asociación Nacional de Pacientes con Insuficiencia Renal Crónica (Anpircf), ha solicitado la suspensión de una licitación para servicios de hemodiálisis de la Caja de Seguro Social (CSS).

En medio de una espera interminable, los pacientes con insuficiencia renal crónica en Panamá continúan su vía crucis en busca de una mejora significativa en la atención de salud.

Los pacientes de hemodiálisis han lanzado una petición urgente al próximo presidente José Raúl Mulino y al ministro de Salud designado Fernando Boyd Galindo. Su solicitud es clara: una auditoría a la actual administración en el tema de hemodiálisis. Los consorcios que compiten por la licitación son Damos Vida y PMC-PM, y la situación ha generado controversia.

Buenas noticias para los pacientes de la Caja de Seguro Social muy pronto contarán con la segunda fase de la Ciudad de la Salud, que comprende el Instituto Especializado de Nefrología, Trasplante y Banco de Sangre, un área de intervencionista, box para diálisis peritoneal y un área de choque.